RINCONES DE PAZ. CAPÍTULO 6.

Es innegable, hoy más que nunca somos ciudadanos del mundo. La vida te lleva a vivir (y a viajar) lejos de tu lugar de origen. Por ello me gustaría mostraros un lugar de paz que guardo con mucho cariño entre mis recuerdos: Howth.

Howth es un pueblecito pescador a las afueras de Dublín con el cual se conecta a través de una  estrecha lengua de tierra  llamada Sutton Cross. 

Aunque efectivamente es una península, esto hace que se tenga la ilusión óptica de estar en una isla muy pequeña. Su historia está salpicada por los pueblos nórdicos, como los vikingos, los cuales invadieron Howth por su posición estratégica entre Escandinavia y el Mediterráneo. En su muelle puedes ver fácilmente focas y delfines mientras rememoras  leyendas, ya que también fue refugio de piratas. Testigos de todo: su roca, su mar y el verde esmeralda de Irlanda.

Su castillo, vigilando desde lo alto la vasta costa, tiene mucha historia por descubrir, tanto histórica como cinematográficamente, y ha sido escenario, entre otras, de una de mis películas favoritas: Dementia 13 de Coppola. Tampoco es de extrañar que éste pequeño pueblo haya inspirado  a numerosos escritores como por ejemplo James Joyce para escribir sus obras: Sus casas de colores, la vista desde lo alto de Torre Martello, su abadía o incluso visitar las ruinas y el cementerio de la iglesia de St Mary desde la cual se ve el mar bravío, te hará conectar inmediatamente con el entorno.

Pero sin duda lo mejor de Howth es sencillamente andar por los pequeños bosques que rodean el castillo, adentrarse en ermitas derruidas y abandonadas, sentir como el frío y el olor del mar se cuela entre los árboles…y soñar despierta. 

Howth es de esos sitios que te hacen sentir libre.

Publicaciones Similares